La plancha de cabello se ha convertido en una herramienta esencial para lograr peinados impecables, ya sea para alisar mechones rebeldes o crear ondas definidas. Sin embargo, su uso indebido puede ocasionar daños significativos en la estructura capilar, resultando en cabello seco, quebradizo y sin vida. Es fundamental conocer las técnicas adecuadas para utilizar la plancha sin comprometer la salud de tu melena.
En este artículo de Peluquerías Low Cost, explicaremos métodos efectivos y consejos prácticos para emplear la plancha de manera segura. Desde la preparación previa hasta el mantenimiento posterior, cada paso es importante para minimizar el impacto del calor en tu cabello. Además, identificaremos errores comunes que debes evitar y recomendaremos productos que actúan como barrera protectora contra las altas temperaturas.
¿Es posible usar la plancha sin dañar el cabello?
La respuesta es sí, es posible utilizar la plancha sin dañar el cabello, siempre y cuando se sigan ciertas precauciones y se adopten hábitos saludables en su uso. El calor excesivo y la frecuencia inadecuada pueden debilitar la fibra capilar, pero con las técnicas correctas, puedes lograr el estilo deseado mientras mantienes la integridad de tu melena.
Es esencial comprender que la calidad de la plancha también influye en la salud capilar. Optar por herramientas de alta calidad con control de temperatura ajustable y placas de materiales como cerámica o turmalina puede marcar una diferencia significativa en la protección de tu cabello. Además, la implementación de una rutina de cuidado capilar adecuada complementará el uso seguro de la plancha.

Preparación previa: cómo proteger tu cabello antes de plancharlo
Antes de aplicar calor, es fundamental que tu cabello esté completamente seco. Planchar el cabello húmedo puede causar daños severos, ya que el agua en el interior de la fibra capilar hierve y provoca roturas. Utiliza un secador a temperatura media y asegúrate de eliminar toda la humedad antes de comenzar el alisado.
Además, desenreda tu cabello con un peine de dientes anchos para evitar tirones y facilitar el deslizamiento de la plancha. Dividir el cabello en secciones pequeñas no solo permite un alisado más eficiente, sino que también reduce la cantidad de pasadas necesarias, minimizando la exposición al calor.
Los mejores productos para proteger tu cabello del calor
El uso de protectores térmicos es indispensable para crear una barrera entre el calor de la plancha y la fibra capilar. Estos productos contienen ingredientes que resisten altas temperaturas y evitan la deshidratación del cabello. Aplicar un protector de calidad antes de cada sesión de alisado es una medida preventiva esencial.
Además, considera productos que aporten hidratación y nutrición adicional, como aceites naturales o sérums específicos para el cabello. Estos no solo protegen contra el calor, sino que también mejoran el brillo y la suavidad de tu melena, contribuyendo a un acabado más saludable y estético.
¿A qué temperatura deberías planchar tu cabello?
La temperatura ideal para planchar el cabello varía según su tipo y condición. Para cabellos finos, teñidos o dañados, se recomienda no superar los 160°C. En el caso de cabellos normales y sanos, una temperatura entre 180°C y 200°C es adecuada. Para cabellos gruesos o muy rizados, se puede llegar hasta 230°C, siempre con precaución.
Es importante destacar que utilizar temperaturas más altas de las necesarias no garantiza un mejor alisado, pero sí incrementa el riesgo de daño capilar. Por ello, ajusta la temperatura de tu plancha según las necesidades específicas de tu cabello y evita el uso prolongado de calor extremo.

Paso a paso para usar la plancha sin causar daño
- Lava y seca tu cabello: Utiliza un champú y acondicionador adecuados para tu tipo de cabello. Asegúrate de que esté completamente seco antes de planchar.
- Aplica un protector térmico: Distribuye el producto de manera uniforme, enfocándote en las puntas y áreas más susceptibles al daño.
- Divide el cabello en secciones: Esto facilita el alisado y reduce la cantidad de pasadas necesarias en cada mechón.
- Ajusta la temperatura adecuada: Configura la plancha según las recomendaciones para tu tipo de cabello.
- Plancha cada sección con suavidad: Pasa la plancha de manera lenta y constante, evitando múltiples pasadas sobre el mismo mechón.
- Finaliza con un sérum o aceite: Esto aportará brillo y sellará las cutículas, manteniendo el cabello protegido y con un aspecto saludable.
Errores comunes al usar la plancha que deberías evitar
Uno de los errores más frecuentes es utilizar la plancha en cabello húmedo, lo cual puede causar daños irreparables. Asimismo, omitir el uso de protectores térmicos deja el cabello vulnerable al calor intenso. Otro fallo común es ajustar la plancha a temperaturas máximas sin considerar el tipo de cabello, incrementando el riesgo de daño.
Además, pasar la plancha repetidamente sobre la misma sección de cabello puede debilitar la fibra capilar. Es preferible realizar una pasada lenta y uniforme en lugar de múltiples rápidas. Finalmente, no limpiar las placas de la plancha regularmente puede acumular residuos de productos, afectando su eficacia y dañando el cabello.
Mantenimiento del cabello después de usar la plancha
El cuidado no termina al apagar la plancha. Después de alisar tu cabello, utiliza un sérum reparador o una mascarilla hidratante para restaurar la humedad perdida. Incorpora tratamientos profundos una o dos veces por semana para fortalecer tu melena y evitar daños acumulativos.
Además, limita el uso de la plancha a dos o tres veces por semana. Esto dará tiempo a tu cabello para recuperarse y mantenerse en óptimas condiciones. No olvides cortar las puntas regularmente para prevenir las puntas abiertas y mantener tu melena saludable.
Con estos consejos, usar la plancha no tiene que ser sinónimo de sacrificar la salud de tu cabello. ¡Cuida tu melena y disfruta de un estilo impecable cada día!
Otros artículos